Fue algo así como un match del honor, realmente no sé como llamarlo, porque no fue un match de entrenamiento.

Yo acababa de trasladarme a vivir a la ciudad de Holguín desde mi pueblo natal San Germán. Era GM y llevaba muchos años entre los 3 mejores de todo el país pero en Holguín la afición era incondicional a Adelquis y cuestionaban quien era el mejor, por muy increíble que parezca. Se hizo necesario jugar un match para calmar un poco los ánimos y situar las cosas en su lugar.

Obviamente Adelquis no formaba parte de ese ambiente de cuestionamiento, era una persona alegre y maravillosa. Forjamos una extraordinaria amistad y cuando falleció en aquel trágico accidente no había un día en que no me acordara de él, fue así durante muchos años. A fecha de hoy, cuando recuerdo aquellas fechas, me parece increíble que Adelquis ya no esté.

En cuanto al ajedrez, fueron 4 partidas. En la primera alcanzamos un final inusual, tres peones contra tres en el flanco rey y las dos torres por bando en el cual pude ganar con una jugada muy precisa que pasé por alto.

En la segunda eligió el siempre difícil sistema Colle pero muy temprano descuidó la posición y pude entrar fácilmente y ganar la partida.

En la tercera gané con comodidad contra su Pelikan y la cuarta fue una partida increíble, de errores múltiples en las que se pasaba de ventaja ganadora de las blancas a posición perdida y viceversa. Finalmente ocurrió el resultado más lógico, las tablas.